Alicante. EFELa sede de Casa Mediterráneo, impulsada por el Ministerio de Exteriores en Alicante y adscrita a la Red de Casas junto a la de América, Asia, África, Árabe y Sefarad-Israel, carece de licencia de actividad municipal pese a que lleva operativa desde hace más de nueve años.
La sede de esta institución de diplomacia pública impulsada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero fue estrenada en enero de 2013 en el edificio de la antigua estación ferroviaria de Benalúa de Alicante, que durante décadas había albergado la línea de tren que unía esta ciudad con Murcia.
Desde entonces y pese a los sucesivos cambios de los directivos de la Casa y los equipos de gobierno del ayuntamiento, se ha operado sin la preceptiva licencia local de actividad a pesar de que este organismo está regido por un consorcio del que forman parte todas las administraciones, incluida el consistorio alicantino.
Desde la concejalía de Urbanismo han señalado a Efe que se espera recibir "en breve" el proyecto integral del inmueble que recoja toda la normativa exigida para este tipo de ocupación con el fin de poder regularizar la situación de Casa Mediterráneo.
En ese proyecto que debe presentar el director de la Casa, el exdiputado socialista Andrés Perelló, se deben incluir algunas adecuaciones y subsanaciones solicitadas por Urbanismo, como la recuperación de una antigua escalera y parte del forjado del edificio principal.
Las reuniones mantenidas por ambas partes en los últimos tiempos han sido "muy positivas" y, previsiblemente, conducirán a una normalización de la situación a corto plazo.
En esta línea, fuentes de Casa Mediterráneo han asegurado a Efe de que en las próximas semanas se entregará a Urbanismo la documentación necesaria para regularizar la actividad siguiendo las recomendaciones de la concejalía, dado que ambas partes son conscientes de que hay que resolver esta situación lo antes posible.
En 2009, el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) cedió por 30 años al Ministerio de Exteriores la antigua estación para acoger esta institución de diplomacia pública, y se elaboró un ambicioso proyecto de rehabilitación para recuperar el inmueble, que en ese momento se hallaba en un claro estado de abandono.
Sin embargo, la crisis económica obligó a recortar el proyecto arquitectónico y a iniciar la actividad sin que se ejecutara todo lo inicialmente previsto, y desde entonces se ha operado sin que llegara a recibirse la preceptiva licencia de actividad municipal.
En todos estos años y pese a la falta de licencia municipal, Casa Mediterráneo ha acogido numerosos eventos de relevancia, todos desarrollados con "absoluta normalidad" desde el punto de vista de la seguridad.
El último de ellos, la celebración que organiza cada año la Generalitat Valenciana por el día de la Constitución, un acto con el Gobierno autonómico en pleno y las principales autoridades de la Comunitat.
También han estado numerosos ministros tanto del Gobierno de España como de otros países de las dos orillas, como el pasado octubre con un foro mediterráneo sobre políticas de Trabajo, entre ellos la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz.
El nuevo director de Casa Mediterráneo es, desde el pasado diciembre, Andrés Perelló, quien se ha convertido en el quinto responsable tras Yolanda Parrado (2009-12), Almudena Muñoz (2012-15), Miguel Oliveros (2015-17) y Javier Hergueta (2017-20).
Además del ayuntamiento de Alicante y el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Casa Mediterráneo está regida por un Consorcio en cuyo Consejo Rector están la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), la Generalitat, el consistorio de Benidorm y la Diputación de Alicante.
