La Guardia Civil ha desarticulado un grupo dedicado a estafar a productores hortofrutÃcolas de la Vega Baja, tras detener a tres personas, dos de ellas una pareja de origen italiano que tenÃa varias sedes de una empresa bajo la que operaban los sospechosos, distribuidas entre las provincias de Alicante y Murcia.
Los arrestados contrataban a los agricultores la compra de la producción de la temporada y, una vez que recibÃan la mercancÃa, desaparecÃan sin abonarla. Luego la vendÃan en el extranjero, en el mercado negro, dificultando asà que se les siguiera la pista, según un comunicado del instituto armado.
Las indagaciones sobre este entramado comenzaron después de que un agricultor denunciara a finales de mayo pasado en el cuartel de la Guardia Civil de Callosa de Segura (Alicante) que habÃa vendido 25.000 kilogramos de cÃtricos a una mercantil y que, hasta esa fecha, los compradores aún no le habÃan pagado.
El equipo contra robos en el campo (ROCA) del instituto armado de Torrevieja (Alicante) se hizo cargo de las pesquisas y averiguó que la empresa bajo la que operaban los presuntos estafadores estaba registrada desde hacÃa tres años y cambiaba con frecuencia de ubicación.
También comprobaron que los investigados, para llevar a cabo su actividad ilÃcita, se valÃan de comerciales conocidos en la zona y en los que los agricultores tenÃan depositada una cierta confianza por haber realizado con ellos contratos anteriores.
Finalmente, los agentes localizaron y apresaron a los principales artÃfices de la trama, una pareja de origen italiano, formada por un hombre de 59 años y supuesto cabecilla del grupo, con antecedentes por estafas cometidas en la Región de Murcia, y una mujer de 54.
Ambos residÃan en Los Alcázares (Murcia) y eran los titulares de la empresa, la cual contaba con sedes en tres municipios: una, en Cox (Alicante); otra, en Callosa de Segura, y la tercera, en Beniel (Murcia).
También ha sido arrestado un español de 56 años, con domicilio en Orihuela (Alicante), que presuntamente hacÃa las funciones de comercial.
Los tres detenidos, acusados de los presuntos delitos de estafa y pertenencia a grupo criminal, han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Orihuela, que ha ordenado su puesta en libertad con cargos, según la nota de prensa.
La Guardia Civil no descarta que aparezcan más perjudicados por esta trama.