Cuatro individuos de entre 25 y 35 años, todos de nacionalidad marroquÃ, han sido detenidos por el presunto secuestro durante varios dÃas de dos hombres capturados en la provincia de Alicante y retenidos en Fuengirola (Málaga), por los que pedÃan un rescate de 150.000 euros.
La operación ha sido dirigida por el juzgado alicantino de Instrucción número 1 de Orihuela y han participado guardias civiles de Alicante, Málaga, Murcia y la Unidad Central Operativa (UCO), de Madrid.
Además, debido a la peligrosidad de los autores y a la gravedad de los hechos ha sido necesaria la actuación del Grupo de Acción Rápida (GAR) y de la Unidad Especial de Intervención (UEI) para asegurar una vivienda y efectuar las detenciones.
Durante el cautiverio, las vÃctimas (también marroquÃes) apenas recibieron alimento y se vieron obligadas a hacerse sus necesidades encima, además de ser golpeadas y amenazadas con ser mutiladas e incluso asesinadas si no se hacÃa efectivo el rescate.
A los cuatro arrestados se les atribuyen los supuestos delitos de secuestro y pertenencia a organización criminal.
Las vÃctimas habÃan sido asaltadas e introducidas en un vehÃculo en la autovÃa A7, entre Alicante y Murcia, la noche del pasado 30 de septiembre.
Los captores pusieron inmediatamente rumbo a la provincia de Málaga y en el trayecto otro coche ejerció funciones de lanzadera a fin de eludir cualquier control policial.
La voz de alarma la dieron en la provincia de Alicante la hermana y la madre de uno de los secuestrados, que acudieron a la Guardia Civil en busca de auxilio tras conocer que tenÃan a su allegado encerrado en algún lugar desconocido y que, a cambio de su liberación, les exigÃan el pago de una exorbitante cantidad de dinero, bajo amenaza de muerte.
Ante la gravedad de los hechos, se activó un amplio dispositivo policial y la investigación permitió ubicar a los captores en una vivienda unifamiliar del núcleo urbano de Fuengirola, donde finalmente fueron liberados los secuestrados debido a la presión de la Guardia Civil.
En un principio se pensaba que solo habÃa un secuestrado pero al desarrollar la operación se descubrió que habÃa otra persona capturada, aunque en este caso su familia habÃa optado por pagar el rescate sin acudir a los cuerpos policiales.
En el registro se intervinieron los terminales telefónicos empleados para realizar las llamadas mediante las que se habÃan impuesto las condiciones económicas para la liberación de los dos jóvenes y también se aprehendieron los dos vehÃculos empleados y dinero en efectivo, entre otros efectos.