Vista del Embalse de Guadalest.- EFE/ J.L. PINO
Una conductora se despeñó por un terraplén de más de 50 metros de altura en la localidad alicantina de Beniardà y solo sufrió "rasguños", algo que ha sido considerado como "un milagro" desde el Consorcio Provincial de Bomberos.
Según las mismas fuentes, el accidente de tráfico tuvo lugar sobre las 15 horas de ayer miércoles, cuando un turismo se precipitó por una ladera de más de 50 metros de altura en las inmediaciones de un mirador con vistas al Embalse de Guadalest. Durante su caída, el vehículo dio varias vueltas de campana antes de quedar detenido en posición lateral cerca de una casa rural.
A pesar del fuerte desnivel y la caída, la conductora y su perro sobrevivieron “milagrosamente”. Según fuentes del Consorcio, tanto la conductora como su mascota solo sufrieron “rasguños” de carácter leve. Pese a todo, y por precaución, la mujer fue trasladada en ambulancia al Hospital Comarcal de La Vila Joiosa para una valoración médica.
El accidente movilizó un importante dispositivo de emergencias. Los bomberos del parque de Benidorm desplazaron un vehículo de jefatura, una autobomba urbana y un furgón de útiles de excarcelación para garantizar la seguridad en la zona y eliminar posibles riesgos en el vehículo siniestrado. Además, un helicóptero medicalizado de la Generalitat acudió al lugar del accidente junto a una ambulancia y efectivos de la Guardia Civil.
Por el momento, se desconocen las causas exactas del accidente, aunque se investigan las circunstancias que pudieron provocar la salida de vía del vehículo en este punto elevado de la Marina Baixa.
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