Secretaria de Comunicación de Unides Podemos, Mar Traver. /EPDA Nos dicen los liberales económicos que la vivienda es un bien de mercado y los medios de comunicación les bailan el agua... claro, los mismos propietarios de los grupos mediáticos son los de las constructoras, promotoras, fondos de inversión dueños de los pisos con alquileres desorbitados y si me apuras, accionistas de los bancos que desahucian a familias que no pueden pagar y que pierden su vivienda pero mantienen la deuda porque "el mercado se ha convertido en la ley del más fuerte".
Por eso, lo que no nos cuentan los medios de comunicación y mucha gente no llega a saber, es que el artículo 47 de la Constitución Española declara que "todos los españoles tienen derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada" y que "los poderes públicos adoptarán medidas para hacer efectivo este derecho, regulando la utilización del suelo de acuerdo con el interés general para impedir la especulación."
No nos cuentan lo que cuesta sacar buenas notas cuando creces en una chabola con frío, lo que cuesta tener salud mental cuando en tu pubertad compartes baño con 14 personas más, lo que cuesta ir a trabajar cuando no duermes porque en la habitación contigua hay una pelea entre los drogodependientes que comparten piso con tu familia, lo que cuesta no buscar alcohol y drogas como evasión cuando tus padres no se soportan pero viven en la misma casa porque no tienen dinero para tener su respectiva vivienda al divorciarse o lo que cuesta plantearse tener hijos cuando vives con tu pareja en 42 m2.
El capitalismo nos lleva a comprar mantras sobre la meritocracia, la superación, que quien quiere puede... eso podría ser válido (y lo pongo en duda porque cada cual tiene sus capacidades y por supuesto todas son maravillosas) si partiéramos de la misma base, si al menos todos tuviéramos un techo.
Y para tener ese techo es necesario que se apruebe la Ley de Vivienda Estatal, promovida por Podemos y que toda la legislatura ha estado frenada por su socio de Gobierno, el PSOE que se niega a algo tan necesario como limitar el precio al alquiler.
Si se pudo limitar el precio de las mascarillas o topar el precio del gas, ¿por qué no vamos a poner freno a la especulación despiadada para permitir algo tan básico como tener una vivienda?
Y ya puestos... si se ha podido limitar el acoso inmobiliario a las familias por parte de los fondos buitre o practicado el derecho de tanteo y retracto para quedarse viviendas en proceso de subasta por impago de hipoteca y dar soluciones habitacionales a quien más lo necesita como ha hecho la Conselleria de Unides Podem con Héctor Illueca al frente, ¿cómo no se va a poder regular el alquiler en una ciudad, que tanto lo necesita, como València?
Porque cuesta mucho gobernar, porque nos dicen siempre que no, pero luego sí se puede, ya es el momento de que España garantice tu derecho a tener un proyecto de vida.
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