A rebufo de las
reformas del hogar que el tiempo en cuarentena permitió concebir,
pero el frenazo económico impidió, 2021 pudo al fin ver crecer esta
actividad en siete puntos porcentuales. Bajo el impulso, más que de
apretar el cinturón, de invertir bien y a largo plazo, el
microcemento ha aparecido en Valencia y nuestra geografía como un
material que lo vence todo. Y la verdad es que sus ventajas dan razón
a su gran popularidad.
La opción más indicada para cualquier
reforma
Como ha sucedido en
otras partes del país, el microcemento
en Valencia vive una edad de oro en la que las
reformas del hogar pendientes que incubó la pandemia, para
muchos ya alcanzables, ha exprimido sus ventajas. Y es que
este material, fabricado a base de resinas, pigmentos, cemento y
aditivos es un revestimiento versátil, de fácil aplicación y
con muchas posibilidades. Sobre todo, si se trata con sus
profesionales.
Según las encuestas
de Houzz de hace dos años, presentando un crecimiento de
siete puntos frente al año previo, el 36% de los particulares
reformó su vivienda en 2021 en España. Ajustando el presupuesto
a la coherencia y bajo un criterio de elección que se centró en la
inversión a largo plazo, hallando en el microcemento una opción
segura e inteligente para ofrecer en sus hogares un
ambiente fresco, amplio y elegante.
Un material beneficioso y duradero
Algunas de las
características más destacadas del microcemento son principalmente
su seguridad, resistencia y durabilidad. Por una parte, ya que
puede impermeabilizarse e incrementar su adherencia para mayor
fiabilidad del usuario. Y, por otra, ya que este material soporta
impactos y cambios de temperatura. Por lo que su durabilidad, de
mantenerse debidamente y usar ceras protectoras, resiste muy bien el
paso de los años.
Además, se trata de
un material inocuo para la salud, ya que gracias a su
tratamiento puede usarse perfectamente como encimera, sin temer por
el consumo de los alimentos dejados en su superficie, existiendo
también vajillas de este material. De aplicarlo en el hogar, siendo
incluso mentalmente relajante. Tanto por su paz y armonía
visuales como al caminarlo descalzo por su lisura, temperatura y
fácil mantenimiento y limpieza.
Un precio ajustado a sus grandes prestaciones
A diferencia de otro
tipo de materiales, el precio del microcemento se debe a su
tipología, ya que éste se adapta a toda superficie y admite
múltiples colores y acabados. Des de un aspecto brillante, mate
o satinado, hasta una extensa gama cromática que brindan los
microcementos listo al uso –de rápida aplicación–, epoxi
–zonas de alto desgaste–, bicomoponente,
monocomponente o tadelak –de mayor dureza y de cariz
artesanal.
Asimismo, gracias a
sus componentes y su mayor manejabilidad, el microcemento goza de una
apariencia granítica o marmórea, sin el coste del mármol y el
granito. Así, haciendo las veces de increíble recurso estético,
aplicable en baños y cocinas, techos, paredes e incluso adaptable
al mobiliario y a exteriores. En este último punto, dada su
resistencia al sol, la lluvia y a las manchas.
Por ello, el precio
medio del microcemento puede situarse en un rango aproximado de entre
70 y 110 euros por metro cuadrado. Si bien el coste del cemento
pulido dista un poco de esa franja, el microcemento no limita jamás
su aplicación a suelos y, además, no requiere de ningún tipo de
obra. Añadiendo, en cuanto a estética, que la menor presencia
de pigmentos del cemento no permite los juegos de color del
microcemento.
Un mantenimiento necesario, pero muy sencillo
En relación a su
mantenimiento, a diferencia de las fisuras y juntas que a menudo sí
da a lugar el cemento, basta con agua y jabón de PH neutro,
sin necesitar de productos químicos y agresivos como el amoníaco o
la lejía. Si bien existen algunos productos específicos para
su limpieza, recomendando buscar las primeras marcas o fórmulas de
la propia empresa contratada. Sobre todo, si queremos que el
revestimiento no se dañe.
Como cualquier otro
material, el microcemento también puede presentar problemas. Las
rayaduras, fisuras o la ausencia de impermeabilidad son las
más comunes; por lo general, a causa de una mala aplicación o la
falta de calidad del material. Sin embargo, en aras de preservarlo
frente al paso del tiempo, una aplicación de cera diluida cada
cierto tiempo a consultar con los profesionales, es ideal para
mantener la capa selladora.
En ese sentido, no
debe olvidarse que sellar el microcemento, además de endurecerlo,
hace más sencillo su mantenimiento. Permitiendo que sus mismos
escudos concedan un plus estético al revestimiento, las capas de
protección de poliuretano protegen de las manchas con acabados
mate, satinados y brillantes. Del mismo modo, los barnices,
además de antideslizantes e impermeables, contribuyen también
al acabado final.
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