El alcalde de Llíria, Manolo Civera, y el presidente de Green Peace España. EPDA. El
Ayuntamiento de Llíria se suma a la conmemoración del Día Mundial del
Medio Ambiente, efeméride que se celebra cada 5 de junio desde que fuese
declarada por las Naciones Unidas en el año 1977. En su condición de
Ciudad Creativa de la Música por la UNESCO, el municipio ha querido
reivindicar también los valores de esta jornada a través de la cultura,
con un concierto de la Banda UDP Llíria-Camp de Túria-Serranos, que se
podrá ver mañana sábado 5 de junio, a las 13.30 horas, en el canal de
YouTube del consistorio.
Este concierto, que se graba esta tarde en la granja escuela Llometa de
Llavata, contará, además, con la presencia del presidente de Greenpeace
España, José David Sandoval, que ha sido recibido esta tarde por el
alcalde Manolo Civera en Ca la Vila.
“El Ayuntamiento sigue, de esta forma, mostrando su compromiso con la
conservación de nuestro entorno natural y la mitigación de los efectos
del cambio climático, con unas políticas de actuación que se plasman en
el desarrollo de diferentes proyectos”, ha destacado el alcalde Manolo
Civera.
Uno
de ellos es la puesta en marcha de diversas comunidades energéticas
locales (CEL), una iniciativa que tiene, como principal objetivo,
incrementar la sostenibilidad del modelo de gestión, producción y
consumo de la energía local.
Acción de la sociedad civil
Pero
el primer edil ha querido recalcar que “el compromiso con el planeta no
es una cuestión únicamente de las administraciones públicas, sino que
también es responsabilidad de la sociedad en su conjunto” y ha puesto
como ejemplo otras iniciativas que surgen también desde el tejido
asociativo local.
Civera
ha valorado “muy positivamente” proyectos como el que pretende promover
la asociación PODEM, una organización sin ánimo de lucro de acción
social y medioambiental, enfocada a la defensa de los derechos de las
personas con diversidad funcional y la preservación del medio ambiente.
Entre
las acciones que realizan se encuentra el voluntariado ambiental en
prevención de incendios forestales, tareas de sensibilización
medioambiental, de recuperación de espacios naturales degradados y de
aves insectívoras, y de erradicación de plantas invasoras, en las que
han participado más de 150 personas, la gran mayoría de ellas con
discapacidad.
Además, la asociación PODEM en colaboración con otras entidades y
personas relacionadas con el medio ambiente, trabaja en estos momentos
en la gestación del proyecto Forestlife, cuyo objetivo es contribuir a
mitigar los efectos del cambio climático, ayudando a las empresas a
reducir su huella de carbono.
Para
ello se usará el mecanismo que la Oficina Española de Cambio Climático
ha puesto a disposición de empresas y organismos, el certificado
medioambiental, que se obtiene mediante un registro voluntario en la
oficina de cambio climático, el cual recoge los esfuerzos de las
empresas, administraciones y otras organizaciones españolas en el
cálculo, reducción y compensación de las emisiones de gases de efecto
invernadero que genera su actividad. Esta compensación se obtiene
mediante la adhesión o inversión en proyectos de forestación o
reforestación, los cuales son auténticos sumideros de carbono que
compensan el que emiten las empresas.
“Creemos
que estas iniciativas son una estrategia eficaz para la preservación
del medio ambiente, con la conservación adecuada de nuestros montes, así
como un yacimiento de empleo que puede ser ocupado por personas con
discapacidad lo cual contribuiría a generar empleo verde y social”, ha
apuntado la concejala de Medio Ambiente, Consuelo Morató.
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