Un vehículo de la Guardia Civil permanece estacionado ante los Juzgados de la localidad alicantina de Torrevieja. EFE/Archivo
Los tres detenidos acusados de agredir el pasado domingo con golpes y empujones a dos agentes de la policía local de Guardamar del Segura (Alicante) han quedado en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juez de guardia de la vecina localidad de Torrevieja.
Según el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), el juez titular del juzgado de Instrucción 1 de Torrevieja ha incoado a los tres arrestados diligencias por la posible comisión de los delitos de atentado, lesiones y daños.
Al mismo tiempo, ha acordado inhibirse de la causa en favor del juzgado de Instrucción 4 de Torrevieja, competente para proseguir la investigación al hallarse de guardia cuando sucedieron los hechos.
Entre las medidas cautelares interpuestas está la obligación de comparecer cada 15 días en sede judicial para firmar, a fin de garantizar que no se sustraigan a la acción de la Justicia mientras que dura la tramitación de un proceso en el que hay dos personas más implicadas, en calidad de investigadas (no detenidas).
Los tres arrestados han pasado las últimas 72 horas en los calabozos de la Guardia Civil de Guardamar a raíz de unos hechos ocurridos el pasado domingo junto al paseo marítimo, donde los agentes de la policía local se disponían a imponer una multa por una furgoneta mal aparcada y a realizar un test de alcoholemia al conductor.
Varias personas forcejearon y agredieron a los dos policías locales, un hombre y una mujer, en una escena que fue grabada por otros viandantes con teléfono móvil antes de ser colgada en redes sociales, lo que hizo que fueran virales.
Entre los agresores se encontraba un menor, que este martes pasó a disposición de la Fiscalía de Menores en una investigación que continúa abierta.
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