Objeto del delito La Guardia Civil ha detenido el día 07 a un varón vecino
de Almazora, como supuesto autor de un total de diez delitos de Robo con
violencia e intimidación. Recaudaba entre 300 y 500 euros cada hecho delictivo.
Las labores de investigación por parte de la Guardia Civil
se iniciaron el pasado 16 de marzo cuando se tuvo conocimiento de que en una
gasolinera de la localidad, un hombre encapuchado entró en el establecimiento
amenazando con un cuchillo a la trabajadora, llevándose la recaudación de la
caja.
El estado de alarma supuso un parón para la actividad
delictiva del autor, quien volvió a actuar el 12 de mayo, cuando se cambió de fase
y se activó la actividad comercial. Esta vez fue en una farmacia, operando de
la misma manera, presentándose encapuchado con un cuchillo. Tras salir
corriendo fue perdido de vista por parte de los perjudicados, los cuales no
pudieron aportar más detalles que la vestimenta que llevaba en el momento del
suceso.
Al mes siguiente produjo un nuevo atraco en otra
gasolinera, portando un chándal con capucha, gorra y mascarilla lo cual impedía
obtener una descripción física que permitiera identificar al presunto autor,
eso sí, repitiendo indumentaria en varias ocasiones.
A partir de ese momento aumentó la frecuencia de robos,
aprovechando horas de poco tránsito y la hora de cierre de establecimientos
para poder huir con mayor facilidad. Actuó en un total de seis locales,
repitiendo el robo en cuatro de ellos (supermercado, una farmacia, una
heladería y una gasolinera).
Los agentes de la Guardia Civil siguieron estudiando los
casos haciendo un análisis delincuencial, buscando elementos similares en todos
los ilícitos y observando los posibles itinerarios de huida del autor. Se
incrementó el esfuerzo policial en este sentido siendo hasta el momento
infructuoso. Hasta que el pasado lunes 07 de septiembre volvió actuar. Se
recibió aviso de la central de que se había perpetrado un nuevo atraco en un
comercio, huyendo esta vez sin poder llevarse el dinero de la caja pues marchó
del lugar al ver que una de las trabajadoras había avisado a la policía. En
base a las investigaciones efectuadas, los Guardias Civiles rastrearon
rápidamente la zona hasta que vieron a un individuo en actitud sospechosa que
arrojaba un bulto. Tras darle el alto procedieron a registrarle superficialmente
observando que lo que había tirado era una sudadera, una gorra y unos guantes,
siendo identificados por la víctima como los que llevaba el autor en el momento
de los hechos. Después de hacer un reconocimiento de la zona se encontró el
cuchillo de cocina (objeto del delito) en un seto, justo al lado de donde fue
arrojada la ropa. Tras ofrecer resistencia el varón fue detenido, siéndole
atribuida la autoría de los otros nueve delitos de robo con violencia e
intimidación.
Tras ser puesto a disposición judicial se ha decretado su
ingreso en prisión por parte del Juzgado de Castellón.
Al autor le constan numerosos antecedentes policiales tras
haber sido detenido en varias ocasiones por delitos de robo con violencia e
intimidación y por desobediencia grave a los agentes de la autoridad.
Había salido de prisión el pasado mes de febrero,
iniciando de nuevo su actividad delincuencial apenas un mes después. La
actuación ha sido efectuada por efectivos de la Guardia Civil de Almazora.
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