Pulpos recién cogidos de la lonja. Archivo/EFE/Paco Torrente
Cas 60 kilogramos de pulpo, sepia, calamares, atún, gambas y otras especies han sido intervenidos en un restaurante de Crevillent, en la comarca alicantina del Baix Vinalopó, por carecer de trazabilidad ni controles sanitarios.
Según la Guardia Civil, el pescado inmovilizado se eleva a 59 kilogramos y se hallaba en arcones congeladores y frigoríficos industriales del establecimiento hostelero. Los productos carecían de la documentación que acreditara su origen, método de captura, controles sanitarios y estado de conservación, poniendo en riesgo la salud de los consumidores.
Entre el pescado detectado se encontraban 33,9 kilos de pulpo, 11,43 de sepia, 3 de calamar, 1,78 de atún, gambas y otras especies marinas, muchas de las cuales podrían ser inmaduras al no alcanzar la talla mínima permitida para su captura y comercialización.
Los productos intervenidos han quedado a disposición de la Dirección Territorial de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca de la Generalitat, que continuará con las actuaciones necesarias. Además, se informó al Centro de Salud Pública de Elche debido a los riesgos asociados al consumo de alimentos que no han pasado los controles sanitarios pertinentes.
Una vez finalizadas las actuaciones de los agentes, el responsable del restaurante se enfrenta a un expediente sancionador por infracciones graves a la Ley 5/2017 de Pesca Marítima y Acuicultura, con multas de hasta 60.000 euros, y a la Ley 14/1986 General de Sanidad, que contempla sanciones de hasta 4.000 euros.
Comparte la noticia
Categorías de la noticia