Giner (Cs) censura al PSPV por consentir que la EMT de Grezzi controle el urbanismo en la ciudad

El portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Valencia, Fernando Giner, ha acusado a la portavoz del PSPV, Sandra Gómez, por "consentir que la EMT, dirigida por el edil Giuseppe Grezzi, controle el urbanismo de la ciudad y esté a cargo de la remodelación de la plaza del Ayuntamiento" y ha anunciado que su grupo pedirá un cambio de estatutos de la EMT para que la entidad se dedique sólo al transporte.

Durante el pleno extraordinario, celebrado hoy a propuesta de Cs, Giner ha censurado al alcalde de Valencia, Joan Ribó, por evitar dar explicaciones sobre los contratos de la plaza del Ayuntamiento que está investigando Antifraude y delegar las mismas en el concejal de movilidad y presidente de EMT, Giuseppe Grezzi.

"Ribó es un cacique implantando su forma de ciudad", ha censurado el portavoz de Cs, durante el pleno extraordinario convocado por Ciudadanos para hablar sobre los contratos "a dedo" de la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento.

El portavoz de Cs ha acusado al alcalde de no cumplir con el acuerdo plenario, de julio del 2017, que supeditaba el diseño de plaza el Ayuntamiento al de la plaza de la Reina y ha cuestionado "por qué el contrato de la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento se hizo desde la EMT, un medio propio que existe para prestar el servicio de transporte de viajeros, pero que reconoce que no tiene los medios necesarios para ejecutar una peatonalización".

Giner ha apuntado también que la EMT ha impedido "el acceso a varias empresas para el contrato. No ha favorecido la libre concurrencia, sino que ha actuado con un dedazo".

"Nos gustaría que Sandra Gómez diera el mismo puñetazo en la mesa que dio Sarriá, en noviembre del año pasado, cuando dijo que la peatonalización de la plaza del Ayuntamiento la haría urbanismo y no movilidad", ha recordado el portavoz naranja, quien, para concluir, ha añadido, referente a la responsabilidad de Grezzi: "Lo que hace el gerente de la EMT es un insulto a los diseñadores de Valencia. Al mes de hacer el contrato a dedo para el diseño de la plaza del Ayuntamiento, a la EMT le robaron cuatro millones y esto ocurre porque está donde no tiene que estar".