Mª José García. EPDA Ana es una vecina de mi población, a la cual en verdad la vida no ha tratado muy bien, pues tras un divorcio un poco virulento tuvo que ponerse a trabajar en diferentes casas para sacar hacia adelante sus dos hijos a su cargo. Ahora con 60 años mira con poca la ilusión su futuro próximo y por supuesto, la perspectiva política.
A mí que me gusta conversar con la gente y saber sus opiniones, hoy he tenido la suerte de poder hablar con ella mientras limpiaba un patio interminable de una finca de nuestra población, y entre pasada y pasada sin parar con su mocho mojado me decía: “Mira Mª José, se que te vas a enfadar porque eres política, pero yo esta vez no voy a ir a votar, no veo que las cosas vayan a cambiar, no veo con esperanza ni mi futuro ni el futuro de España”. A lo que yo le contestaba: Ana, respeto tu opinión pero no la comparto, es necesario acudir a votar para cambiar la situación, todo voto es útil indistintamente votes a quien votes. Si no votas ganará la indiferencia, ganará la dejadez, y eso significa que da igual quien gobierne este país, da igual lo que pase en él, da igual cual es el futuro que queremos para nuestros hijos. Sé que hay decisiones y estrategias políticas que a veces no llegamos a entender, en este caso la de realizar unas nuevas elecciones, pero tú Ana siempre has sido una persona luchadora, una persona incansable, una persona que con tu propio esfuerzo has sabido sacar a tu familia hacia adelante y siempre has sabido decidir lo mejor para ellos y para ti, por eso me sorprende que ahora tires la toalla y dejes a la deriva una decisión tan importante como es la de emitir tu derecho al voto. A lo que prosiguió Ana: “es que Mª José no me da la sensación que en estos momentos se esté luchando por nuestras preocupaciones reales, por nuestras necesidades, por nuestro futuro. Solo veo caos”.
Pues fíjate Ana, yo creo que es posible un futuro diferente más allá de las mediocridades, de los bandos, de las zancadillas, de los protagonismos. Creo que hay distintas formas de hacer política con personas muy válidas, que las hay, y que se preocupan por las personas y no por sus sillones. Creo en nuestro país, en nuestra comunidad, en nuestra población, y que tan solo hace falta alguien que lo ponga en valor, que ponga en valor a los jóvenes, a los mayores, a todas las personas que viven en él. Que baje a la realidad en la que vivimos.
Pero también te digo Ana, que siempre nos las hemos apañado en este país para salir de los momentos complicados porque somos personas perseverantes, luchadoras y positivas, y porque además hemos remado todos juntos en una misma dirección. Por eso pienso que hay esperanza, que podemos avanzar, en definitiva, que necesitamos mirar hacia el futuro y no hacia el pasado. Mirar la política desde otra perspectiva diferente de cómo hasta ahora lo hemos hecho, desde la perspectiva de la unión como en un equipo deportivo.Estoy convencido de que la participación nos llevará a buen puerto, y nos permitirá elegir en cada momento el camino más adecuado para lograr cada una de las metas que nuestra sociedad se ha puesto por delante. La innovación social nos seguirá facilitando un progreso igualitario, con mayores oportunidades de empleabilidad y formación, protegiendo a las personas más vulnerables; todo, con el firme objetivo de garantizar un futuro mejor.
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