Sergio Muniesa. En estos casi más de cinco años de tripartito han callado ante el abandono de nuestro patrimonio.
Hay silencios elocuentes, como cuando hace aproximadamente un año cuando ante la afirmación del Gobierno de que no tenía ninguna previsión de actuación para recuperar el patrimonio cultural que supone el conjunto histórico industrial del Puerto de Sagunto. Esta pasividad y falta de acción es un castigo injusto para el patrimonio de nuestra ciudad.
Cuando uno recibe una noticia tan negativa y la respuesta local es el mutismo, preocupa porque no hace sino confirmar el entreguismo que ha caracterizado a este gobierno en estos más de cinco años.
Llevamos años exigiendo el paso a la acción y que se deje de hablar de apostar por nuestro patrimonio y exigir al gobierno autonómico de Puig y Oltra y nacional que, de una vez por todas, hagan algo en nuestra ciudad.
En estos más de cinco años han dejado a nuestra ciudad sin inversiones clave para nuestro municipio más allá de hablar y hacer como si se enfadan cuando recibimos estas noticias.
Cuando gobernamos demandamos inversiones y esas peticiones tuvieron su fruto. Se invirtieron 20.000.000 de euros en la recuperación del patrimonio de la ciudad y se llevaron a cabo por ejecutivos del Partido Popular a nivel local o autonómico.
El problema es que llevamos más de 5 años sin dar continuidad a esas inversiones, a un entorno industrial e histórico que, año tras año, sufre el desprecio de los gobiernos del cambio, que votan en los presupuestos de la Generalitat, por ejemplo, que no se destine ni un euro para un proyecto integral en la Gerencia, tras que el PP lograra que fuera pública. Esa es la realidad patrimonial de nuestra ciudad.
Resulta paradójico que, quienes firmaron “el pacto de la gerencia” no exijan a la Generalitat la inmediata rehabilitación del conjunto y su puesta en marcha de forma integral como referente educativo y cultural.
Este cúmulo de despropósitos en la gestión del tripartito hace que hoy la alquería del aigua fresca, espere sine die una actuación para ponerla en valor, que el museo industrial siga cerrado, sin fecha y objeto de actos vandálicos, que hayan pasado de las pancartas reivindicativas a tapiar el economato y así con cada elemento de nuestro patrimonio. Mucha pancarta cuando la responsabilidad era de otros, y ahora desaparecidos.
Esta no es forma de poner en valor esos espacios. Al alcalde y a su tripartito más le vale reclamar para nuestra ciudad inversiones al Estado y a la Generalitat y hacer valer su peso político y no evidenciar una vez más la debilidad que hacen gala, ¿o se va a quedar todo como hasta ahora?
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