Varios trabajadores de la planta de pintura de Ford en Almussafes (Valencia). EFE La dirección de Ford en Almussafes y los sindicatos representados en el
Comité de Empresa de la planta celebrarán este martes la primera reunión
del periodo de consultas del expediente de regulación de empleo (ERE)
planteado por la compañía para 400 trabajadores.
Los sindicatos
están expectantes ante la postura que mantendrá la empresa y si va a
mostrar voluntad negociadora para rebajar la cifra inicial de afectados,
y quieren evitar ante todo salidas traumáticas.
La primera reunión del periodo de consultas del ERE, que tiene un plazo de 30 días, se celebrará a las 10 horas.
El
pasado martes Ford planteó a los representantes sindicales la reducción
de la plantilla en 400 personas ante la bajada de la producción, de
unos 100 coches diarios, a pesar del éxito del lanzamiento del Kuga y de
las buenas expectativas para este modelo.
En septiembre de 2019
la empresa tuvo que acometer la eliminación de una parte del turno de
noche de la Planta de Montaje de Vehículos y hacer frente a una bajada
de producción de 100 unidades diarias por la disminución generalizada de
las ventas de automóviles que afectaba a la factoría.
Pero en
aquel momento se pudo recolocar el exceso de personal en actividades
relacionadas con el lanzamiento del nuevo Kuga y se acordaron días de
ERE con la mayoría del Comité de Empresa, evitando así tener que tomar
medidas de ajuste estructurales a la espera de la evolución de la
demanda en 2020.
Una vez finalizado el lanzamiento, pese a que la
demanda del Kuga sigue siendo fuerte, la realidad del mercado con su
continuo descenso de ventas en otras líneas de vehículos hace necesario
un nuevo ajuste de producción, con una reducción de unidades de
vehículos diarios, situando así la producción diaria en unos 1.640
coches, informó la empresa a los sindicatos.
Los sindicatos
(UGT, STM, CCOO y CGT) pedirán, según han anunciado, que la extinción de
empleo se plantee por pirámide de edad y mediante bajas incentivadas,
prejubilaciones y recontrataciones, si bien primero han de ver qué
planteamientos lleva la empresa a la reunión.
El sindicato UGT,
mayoritario en la factoría Ford, pedirá a la dirección explicaciones de
por qué intenta circunscribir el ERE a las plantas de vehículos, y como
pretende hacer el reparto de ese recorte de 400 empleos.
UGT
pedirá también alcanzar acuerdos para que la rescisión de contratos se
base en la voluntariedad, y que incluya a la totalidad de la fábrica,
además de explicar si en esos cálculos se contempla el futuro empleo de
la nueva planta de baterías, ya que considera un requisito indispensable
que el 100 % del empleo en esta planta sea personal de Ford.
En
el último ERE, que se aplicó hace una década en la planta y afectó a 600
trabajadores, Ford y UGT acordaron 200 prejubilaciones y bajas
incentivadas y 400 recontrataciones en un periodo de tres años.
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