Rocío Gil. EPDA El Ayuntamiento de Valencia aprobó ya hace unos meses, a petición de Ciudadanos (Cs), una ventanilla única para las víctimas de violencia de género. No obstante, todavía no se ha puesto en marcha. Exigimos que se haga cuanto antes porque este nuevo instrumento sería muy eficaz para proteger a las mujeres y a sus hijos e hijas.
Por una parte, es importante dotar a las víctimas de los máximos espacios de seguridad, confianza y confidencialidad para que no tengan que peregrinar por los distintos servicios municipales. Por otra, es necesario que se centralicen las gestiones que ha de realizar la víctima. Que una mujer maltratada haya de ir a diferentes lugares con su sentencia a pedir las ayudas que le corresponden es, cuanto menos, poco empático. Compromís y PSPV deberían abrir, sin más dilación, esta ventanilla única y ahorrar a las víctimas los obstáculos a los que ahora se enfrentan.
Además, es una medida que el Pacto de Estado contra la Violencia de Género recomienda y que, a pesar de que otras ciudades y comunidades autónomas españolas ya la tienen, en Valencia todavía seguimos esperando.
En este sentido, es lamentable que dos partidos que se erigen como protectores de las mujeres actúen de esta manera. No solo no ejecutan esta iniciativa sino que han tardado un año y medio en aprobar la programación del Plan de Igualdad, que ha estado prorrogada durante todo este tiempo y a la que además han dotado de menos dinero. No es que hayan congelado el presupuesto, es que lo han rebajado en casi tres millones de euros y precisamente en áreas fundamentales. La disminución en educación es del 12,15%; en cultura, un 19,08% y en inclusión social, un 15,22%. Ver para creer.
En la misma línea, la programación del Plan, que finalmente aprobamos y que estará vigente hasta 2024, recorta en programas específicos de orientación laboral; asesoramiento técnico y formación en materia de igualdad y conciliación a empresas; ayudas al alquiler social; y viviendas de transición para mujeres víctimas de violencia de género o de trata para la explotación sexual, entre otras partidas que Cs considera imprescindibles.
En definitiva, la protección a las víctimas de violencia de género y el fomento de la igualdad requieren altura de miras, tomar decisiones más allá de los colores políticos y mucha acción. De nada vale que a algunos se les llene la boca de feminismo e igualdad si luego tienen en sus manos actuar en consecuencia y no lo hacen. En Cs tenemos claro que el compromiso con las mujeres se demuestra presentando iniciativas y trabajando para conseguir su aprobación.
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