Hospitalizado un guardia civil que participó en el rescate de dos bañistas en una playa de Torrevieja

La Guardia Civil, con la ayuda de la Policía Local, ha rescatado a dos bañistas en la playa de La Mata de Torrevieja que estaban en apuros al no poder salir del agua por la fuerte corriente y oleaje que había ese momento en la zona, donde ondeaba la bandera roja por esa circunstancia.

Tanto uno de los bañistas como uno de los agentes de la guardia civil tuvieron que ser trasladados a un hospital. De hecho, el agente tuvo que ser finalmente sacado del agua por su propio compañero debido a su extenuación.

El instituto armado ha informado este martes en un comunicado de esta intervención, llevada a cabo ayer tras ser alertado en torno a las 20 horas por parte de la Policía Local.

Una patrulla de la Guardia Civil se desplazó hasta el lugar donde observó a un hombre de 27 años y a una mujer, de 37, ambos españoles, sujetos a dos boyas, a una distancia de la orilla de unos 50 y 75 metros, respectivamente.

Dos agentes, ayudados con una cuerda por las dos patrullas de la Policía Local de Torrevieja que se hallaban en la zona, se introdujeron en el mar para tratar de alcanzar a los bañistas y recogerlos.

Tras varios intentos sin éxito debido a las condiciones del mar, finalmente los efectivos entraron en diagonal hacia los bañistas y los pudieron rescatar.

Ya en tierra, el equipo médico de una unidad del Samu asistió en el lugar al joven con síntomas de ahogamiento, antes de ser trasladado en una ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB) al Hospital de Torrevieja, según han señalado, por su parte, fuentes del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (Cicu).

Los servicios sanitarios también atendieron por dificultades respiratorias a uno de los guardias civiles que intervino en el recate y que, según la nota de prensa de la Benemérita, tuvo que ser sacado del agua por su propio compañero debido a su extenuación.

Finalmente fue llevado por una unidad de soporte vital avanzado al Hospital Quirónsalud Torrevieja, donde, según fuentes de la Guardia Civil, permanecía ingresado, consciente, aunque aturdido y deshidratado.