Imagen cedida por la Guardia Civil de uno de los detenidos. EFE
Dos hombres de 31 y 36 años han sido detenidos en Callosa d'en Sarrià acusados de estar involucrados en once robos en el municipio, además de por un delito de quebrantamiento de orden de alejamiento para uno de ellos, puesto que tenÃa una orden de alejamiento sobre el propietario de una de las casas en las que presuntamente robó.
La Guardia Civil ha explicado que las investigaciones se iniciaron el pasado abril, después de que se detectara un incremento en el número de robos en viviendas, por lo que los agentes comenzaron a llevar a cabo reconocimientos y vigilancias en áreas estratégicas, fortaleciendo los dispositivos operativos de prevención de la Seguridad Ciudadana.
AsÃ, se logró identificar a dos vecinos de la localidad, quienes eran conocidos por los agentes debido a sus antecedentes por delitos contra el patrimonio.
Tras diversas gestiones policiales, se recopilaron pruebas que confirmaron la participación de los sospechosos en varios robos en la localidad, por lo que se inició un dispositivo de localización y detención que culminó el pasado 12 de julio, cuando uno de los objetivos fue detenido infraganti mientras cometÃa un nuevo robo con fuerza en otra vivienda.
De hecho, durante el robo, el ya detenido quebrantó una orden de alejamiento que tenÃa con uno de los moradores.
Por su parte, el segundo sospechoso fue arrestado en su domicilio el mismo dÃa y se registró la vivienda de uno de ellos, donde fueron intervenidas herramientas y documentación relacionada con objetos previamente sustraÃdos, asà como correspondencia postal sustraÃda entre los años 2016 y 2017, lo que podrÃa afectar a alrededor de 2.200 vÃctimas.
Ambos detenidos, junto con los efectos intervenidos, han sido puestos a disposición del Juzgado de Guardia e Instrucción de Villajoyosa, que ha decretado la puesta en libertad de ambos con la imposición de medidas cautelares.
La Guardia Civil está trabajando activamente para identificar y devolver los efectos robados a sus legÃtimos propietarios. Hasta el momento, algunos efectos ya han sido reconocidos por sus legÃtimos dueños.
