Agentes de la Guardia Civil de Alicante han desarticulado a un activo grupo criminal que supuestamente perpetró robos en viviendas de Alicante, València, Ciudad Real, Cuenca, Valladolid, Lugo, Madrid y Toledo, y han detenido a sus seis integrantes.
Según un comunicado del Cuerpo Armado, el grupo criminal robaba en viviendas habitadas cualquier objeto de valor que pudieran vender posteriormente, a través de un establecimiento de Madrid, provincia en la que tenÃan fijada su residencia.
El pasado 14 de diciembre se produjo un robo con fuerza en una vivienda de Guardamar del Segura (Alicante), en el que los autores fueron sorprendidos por el dueño, que sufrió heridas en el brazo con un destornillador cuando los asaltantes emprendieron la huida en un vehÃculo que les esperaba en la calle.
Entonces los agentes de PolicÃa Judicial de la Guardia Civil del municipio, en colaboración con el Grupo de Patrimonio de la Unidad Orgánica de PolicÃa Judicial de la Comandancia de Alicante, comenzaron la operación Escomón.
En el marco de esta investigación, identificaron a dos de los autores, que tenÃan fijada su residencia en Batres (Madrid), un tranquilo pueblo en el que pasaban desapercibidos.
En el transcurso de la investigación se comprobó que formaban parte de un grupo criminal dedicado al asalto, a nivel nacional, de viviendas habitadas y que estaba perfectamente jerarquizado y coordinado por un cabecilla, que era quien planeaba dónde iban a entrar.
La organización contaba con una sofisticada herramienta, que les permitÃa abrir todo tipo de bombines de cerraduras, de las puertas de acceso a las viviendas, sin que apenas se apreciara que habÃa sido fracturado.
El grupo seleccionaba viviendas que iban a quedarse vacÃas por las mañanas, en las que previamente se constataba que sus inquilinos se marchaban, para poder actuar con tranquilidad y buscar, seleccionar y preparar los objetos que se iban a llevar, especialmente joyas, relojes, aparatos electrónicos de valor y dinero en efectivo.
Igualmente era de su interés ropa, calzado o bolsos, si estos eran de primeras marcas y tenÃan valor, asà como también documentación personal de los moradores, para su posterior falsificación y uso fraudulento en otros hechos.
Posteriormente, estos efectos sustraÃdos eran comprados por un empresario de reparaciones de telefonÃa móvil y ordenadores de Coslada (Madrid), quien les pagaba por ellos una cantidad mucho más baja de su precio real en el mercado y les daba salida, por lo que actuaba como receptador.
La banda la integraban una mujer y cinco hombres, cuatro de los cuales se encargaban de perpetrar los robos y dar seguridad en las casas habitadas mientras se cometÃan, y el quinto era el propietario del establecimiento de Coslada que compraba lo sustraÃdos y lo revendÃa.
La mujer hacÃa compras en establecimientos todo tipo de muebles, gafas de sol, teléfonos móviles, todo de primeras marcas y de un alto poder adquisitivo, que financiaba con la documentación previamente sustraÃda en los diferentes robos.
El pasado viernes 5 de abril, fueron detenidos en València tres de los integrantes de la organización tras una persecución en vehÃculo por las calles de la ciudad, cuando venÃan de cometer varios robos en la localidad valenciana de Xátiva y les incautaron los efectos recién sustraÃdos.
El resto de integrantes fueron detenidos tres dÃas después en la provincia de Madrid, dos de ellos en Batres y otro en Coslada.
En dos registros en Batres y en el municipio toledano de OntÃgola, se han intervenido numerosos objetos y joyas procedentes de los robos, que están siendo analizados para determinar su procedencia y el hecho delictivo al que cada uno pertenece.
Los detenidos son cinco hombres de nacionalidad colombiana, de edades comprendidas entre los 25 y los 40 años y una mujer, también colombiana, de 24 años, a quienes se les imputan los delitos de robo con fuerza, lesiones, pertenencia a grupo criminal y el de receptación.
Todos ellos ya han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Torrevieja, quien ha decretado el ingreso en prisión de cuatro de los hombres, mientras que el otro y la mujer han quedado en libertad provisional con cargos, a la espera de juicio.